El reciclaje y el ahorro de energía
y agua son algunos de los hábitos más frecuentes que practican los ciudadanos
para contribuir al consumo responsable según se desprende del estudio ‘Consumo
Responsable y Desarrollo Sostenible’, elaborado por Eroski y el Club de
Excelencia en Sostenibilidad con la colaboración de IPSOS España y el apoyo del
Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Así, un 55 por ciento de los
consumidores consideran que reciclar residuos es una forma eficaz de contribuir
al consumo responsable para el desarrollo sostenible mientras que un un 39,5
por ciento afirma que reducir el ahorro de luz y de agua también es una medida
que ayuda a la sostenibilidad, según informa Eroski.
En menor grado, hacen alusión al
ahorro de calefacción y aire acondicionado (27 por ciento), el uso de
transporte público o no utilizar el coche (17 por ciento) y la reducción del
uso de los electrodomésticos (12 por ciento).
El estudio también subraya que, a
juicio de los consuimidores, los responsables de informar sobre desarrollo
sostenible les corresponde principalmente a la administración pública (77 por
ciento), la educación universitaria (24 por ciento), los medios de comunicación
(23 por ciento) y, en menor medida, al tercer sector (21 por ciento) y a la
empresa privada (18 por ciento).
Además, el documento revela la
evidente preocupación por la crisis económica (30 por ciento) seguida de la
pobreza y las desigualdades sociales (25 por ciento), mientras que los
problemas que afectan al medio ambiente quedan relegados al final (8 por
ciento) como cuestiones menos urgentes.
CONSUMO
RESPONSABLE
Por otro lado, el informe afirma que
las expresión “consumo responsable” es utilizada por el 66 por ciento de los
encuestados para hablar de la compra, la administración del hogar, el gasto de
energía o agua, el transporte y el ahorro mientras que el 36 por ciento utiliza
“desarrollo sostenible” para hablar de medio ambiente o fuentes de energía,
desarrollo económico y empleo.
En este sentido, el estudio refleja
que los comportamientos que orientan el consumo responsable están relacionados
sobre todo con hábitos que rigen lo cotidiano como comprar lo necesario (44 por
ciento) y a factores relacionados con el hogar y la economía doméstica como los
servicios y la eficiencia de los electrodomésticos (30 por ciento.
En concreto, el 14 por ciento
procura elegir productos ecológicos en alimentación (pese a que son más caros)
y un 26 por ciento procura que la ropa y complementos sean producidos en países
que respeten los derechos humanos. Por contra, sólo el 10 por ciento recuerda y
tiene en cuenta los proyectos sociales que realizan las empresas, según informa
la Eroski.
Por ello, la directora de Marketing
Cliente-Marca de Eroski, Leire Barañano, ha explicado que “es necesario adoptar
por parte de las empresas pautas de comportamiento socialmente responsables” ya
que “aunque el consumidor no premia a corto plazo a las empresas comprometidas
sí castiga a aquellas empresas que no lo asumen y practican”.
Por su parte, el presidente del Grupo
Eroski, Agustín Marcaide, ha señalado que “las empresas deben asumir su papel
en el desarrollo sostenible integrándolo dentro de las estrategias y objetivos
para comunicar a los consumidores su actuación y aportarle información que les
permita elegir un consumo más sostenible”.
Fuente: ecoticias.com