El pasado 5 de junio, como cada año desde 1973, el mundo celebró su Día Mundial del Medio Ambiente. Hay quien repara en el entorno de manera puntual y quien lo hace constantemente, como Movilex, estipule lo que estipule el calendario.
Existen muchas medidas para cuidar nuestro ecosistema y, una de tantas, es recuperar piezas de antiguos coches, más ecológicas y, por si fuera poco, más económicas. Por un motivo u otro, se nos ha instaurado la idea de que lo nuevo siempre es mejor, pero hay ocasiones en las que este argumento bien carece de validez.
Si hay algo que todos buscamos en cualquier producto es calidad. Y aquí es cuando desmontamos opiniones: las piezas de desguace adquieren su garantía conforme cruzan la puerta.
No hay ni una sola que no experimente su correspondiente control de calidad. Por eso, todo producto expuesto en Movilex Card para la venta se ajusta a unas exigencias que responderán positivamente en la seguridad del vehículo del que formarán parte en un futuro.
Si no es suficiente ventaja el cuidado de la naturaleza, otro punto fuerte de la adquisición de piezas usadas es el ahorro económico. Y es que son muchos los que, en estos tiempos de crisis, no pueden acceder a los recambios de la casa a la que pertenece su coche, como muchos son los que se ven en la necesidad de aguantar con el mismo vehículo durante más tiempo del aconsejado.
Movilex Card es uno más de los cientos de Centros Autorizados de Tratamiento (CAT) en los que el despiece selectivo sacará de un apuro al pequeño comprador, ése que sólo tiene que plantarse delante de las estanterías y buscar la pieza, descontaminada y desmontada, que se ajuste a sus necesidades.
