sábado, 5 de julio de 2014

Reciclar, una cuestión de todos

La mayor parte de la ciudadanía cree que con depositar la basura en un contenedor cumple con la premisa del reciclaje. Durante unos años hubo una concienciación de separar lo orgánico de lo inorgánico, y dentro de éste el plástico, el cartón, el vidrio o las pilas, por poner un ejemplo. Se ubicaron puntos de recogida fijos y móviles para pequeños electrodomésticos o muebles. Pero con el tiempo aquello pasó de moda.
No es extraño caminar por una de nuestras urbes y encontrarse un frigorífico, un microondas o un butacón roto al lado de los contenedores para el depósito de materiales específicos. "¡Ya vendrán a recogerlo!", piensan los que ahí lo dejan, pese a que los concellos dan facilidades para llevarlos si se les avisa. Por eso es precisa una nueva concienciación, ya que de nada sirve implementar políticas de reciclaje si la ciudadanía no se implica.

Sogama, que con su gran planta en Cerceda agrupa prácticamente a todos los ayuntamientos de Galicia, apenas llega al 10% del reciclaje de las basuras que recibe; Albada, que la tiene en Nostián y acoge al ámbito metropolitano de A Coruña, a pesar de que comenzó bien su proyecto innovador, con respecto al anterior se acerca solo al doble, y la planta del Barbanza en Lousame, quizá por estar en un ámbito más rural, supera el 36% merced a la fabricación de compost.

Por Alberto Martínez